Laura Sarabia presentó su dimisión como canciller de Colombia el 3 de julio de 2025, mediante una carta dirigida al presidente Gustavo Petro, citando diferencias con recientes decisiones gubernamentales que no puede respaldar por “coherencia personal y respeto institucional”.
En la misiva, Sarabia destacó su trayectoria junto a Petro, marcada por logros, dificultades y una relación de franqueza y confianza, subrayando que su lealtad se basa en cuidar al otro, un principio aprendido del presidente. Sin embargo, señaló que las decisiones recientes de la Casa de Nariño representan un rumbo que no puede ejecutar.
La renuncia, fruto de una “reflexión profunda”, refleja su compromiso con el país y su visión del poder. Sarabia agradeció la oportunidad de participar en un proyecto político que le dejó aprendizajes significativos, pese a los retos enfrentados.
El Ejecutivo aún no ha anunciado quién asumirá la Cancillería tras la salida de Sarabia, quien había sido una de las aliadas más cercanas de Petro desde el inicio de su mandato en 2022.