El presidente de Francia, Emmanuel Macron, aseguró este domingo que las ocho joyas patrimoniales robadas del Museo del Louvre serán recuperadas y que los responsables serán llevados ante la justicia. El mandatario calificó el audaz asalto como un “atentado contra un patrimonio que apreciamos” y afirmó que se está haciendo “todo lo posible, en todas partes” para resolver el caso.
El robo, calificado como “robo en banda organizada”, ocurrió a las 09:30 (hora local) cuando cuatro delincuentes ingresaron por el flanco sur del edificio y accedieron a la Galería Apolo, rompiendo una ventana y forzando las vitrinas. Sustrajeron piezas del Segundo Imperio, incluyendo diademas, collares y broches. Durante la huida, los ladrones abandonaron y dañaron la corona de la emperatriz Eugenia de Montijo, una joya con 1.354 diamantes. La Fiscalía de París ha desplegado una ofensiva investigativa con sesenta agentes, mientras que el museo tuvo que cerrar sus puertas por el resto de la jornada.