Una maestra de una institución educativa en Venezuela fue detenida y encarcelada luego de regañar a uno de sus alumnos, cuyo padre es un reconocido militante del movimiento chavista y un funcionario público. La detención de la docente se produjo tras la denuncia del progenitor, quien alegó que la maestra había incurrido en maltrato hacia su hijo menor. El caso ha generado una fuerte reacción de gremios de educadores y defensores de Derechos Humanos en el país, quienes denuncian que se trata de un claro ejemplo de abuso de poder y la utilización del sistema judicial para ejercer represalias políticas por motivos triviales.
La detención fue calificada como una violación a los Derechos Humanos y una amenaza directa a la autonomía pedagógica de los maestros. Organizaciones no gubernamentales han exigido la liberación inmediata de la docente y han solicitado a las autoridades que se respete el debido proceso, destacando la creciente politización de las instituciones, incluso dentro de los centros escolares del país.








