En un contexto laboral cada vez más competitivo, la elección de una carrera universitaria se ha convertido en una decisión estratégica para quienes aspiran a una estabilidad económica y profesional. Según un análisis reciente de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), publicado por El Telégrafo, cinco profesiones se destacan en Ecuador por ofrecer las mejores remuneraciones en 2025.
Encabezando la lista se encuentra Medicina y Cirugía, con un ingreso mensual promedio de $4.000. Esta cifra responde a la alta responsabilidad, la extensa formación y la escasez de especialistas en algunas regiones del país. Los ingresos anuales pueden superar los $48.000.
En segundo lugar, la Ingeniería Química mantiene una fuerte presencia en el mercado, con aplicaciones en la industria farmacéutica, petrolera y alimentaria. Los profesionales de esta rama pueden ganar entre $1.500 y $5.000 al mes, con salarios anuales de hasta $36.000, dependiendo del sector y la experiencia.
La Ingeniería Mecánica ocupa el tercer puesto, impulsada por el desarrollo industrial del país. Los ingenieros mecánicos desempeñan un papel fundamental en la optimización de procesos y mantenimiento de maquinaria, con salarios mensuales promedio que superan los $2.500 y ingresos anuales estimados en $30.000.
En cuarto lugar se encuentra la Ingeniería del Petróleo, vital en la economía nacional. Como país petrolero, Ecuador continúa requiriendo expertos en extracción, refinación y gestión de recursos energéticos. Los ingenieros en petróleo ganan en promedio $2.200 al mes, acumulando ingresos anuales cercanos a los $26.400.
Finalmente, la Ingeniería de Sistemas se posiciona en el quinto lugar, impulsada por la transformación digital que atraviesan empresas públicas y privadas. Con sueldos que oscilan entre los $1.919 y $2.000 mensuales, estos profesionales se han vuelto indispensables para la innovación tecnológica y la ciberseguridad.
Expertos coinciden en que, más allá de la remuneración, el éxito profesional también depende del constante perfeccionamiento y adaptación al cambio. Las carreras STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) seguirán liderando los rankings en los próximos años, ofreciendo a los jóvenes oportunidades de crecimiento sostenible y estabilidad económica.