Un devastador terremoto de magnitud 8,8 en la costa de la península de Kamchatka, en el lejano oriente de Rusia, ha provocado la activación de alertas de tsunami en una extensa área del Océano Pacífico. El sismo, que tuvo su epicentro a unos 18,2 kilómetros de profundidad, ha llevado a múltiples países a emitir advertencias y a implementar protocolos de emergencia.
Entre las naciones que han emitido alertas de tsunami se encuentran:
- Estados Unidos (Hawái y Alaska, y la Costa Oeste): La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) emitió una alerta para Hawái y partes de Alaska, y una vigilancia para la costa oeste de EE. UU. y Canadá. Se instó a la población a tomar medidas urgentes y proteger vidas y propiedades, con olas que podrían llegar a Alaska en una hora y a Hawái en unas cuatro.
- Japón: La Agencia Meteorológica de Japón (JMA) elevó la alerta de tsunami a hasta 3 metros para sus costas del Pacífico, ordenando evacuaciones en 13 prefecturas. Se esperan olas de hasta 1 metro en la Bahía de Tokio y Osaka.
- México: El gobierno mexicano solicitó a las autoridades de Protección Civil mantener a la población alejada de las playas del Pacífico, desde Baja California hasta Chiapas, donde se esperan olas de entre 30 centímetros y un metro.
- Filipinas: Las autoridades advirtieron sobre olas “inferiores a un metro” y pidieron a los habitantes de más de 20 provincias que se mantengan alejados de la costa y, si viven cerca, se trasladen tierra adentro.
- Taiwán: La Agencia Central de Meteorología (CWA) emitió una advertencia de tsunami (segundo nivel de alerta más alto) y pidió a los residentes de zonas costeras estar vigilantes, aunque no se ordenaron evacuaciones. Se prevén olas de entre 0,3 y 1 metro en las costas sureste y suroeste.
- Ecuador: La Armada de Ecuador alertó sobre una “alta probabilidad” de tsunami en sus costas.
Indonesia también analizó el terremoto y determinó el potencial de un tsunami en su región con un estado de alerta (altura de tsunami inferior a 0,5 metros). La situación continúa en monitoreo por parte de las autoridades internacionales y nacionales, quienes reiteran la importancia de seguir las indicaciones y mantenerse informados.