Los ministros de Defensa, Giancarlo Loffredo, y del Interior, Jhon Reimberg, de Ecuador, visitaron el 29 de abril de 2025 el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT) en El Salvador, una megacárcel de máxima seguridad construida bajo el gobierno de Nayib Bukele, según reportes del 30 de abril. Acompañados por el comandante de la Policía de la Zona 8, Pablo Dávila, los funcionarios recorrieron las instalaciones, diseñadas para albergar a 40.000 pandilleros, con el objetivo de conocer el modelo penitenciario y las estrategias del Plan Control Territorial, que ha reducido significativamente la criminalidad en el país centroamericano.
La delegación ecuatoriana se reunió con el ministro de Justicia y Seguridad Pública, Gustavo Villatoro, y el ministro de Defensa, René Merino, para analizar la coordinación entre Fuerzas Armadas y Policía, así como el uso de tecnología en seguridad electrónica y gestión carcelaria. El Ministerio de Defensa de Ecuador calificó al CECOT como “el centro carcelario más avanzado y seguro de Latinoamérica”, destacando su infraestructura, que incluye un muro de 11 metros, alambradas electrificadas y sistemas de videovigilancia. Esta visita refuerza la cooperación entre ambos países, intensificada por el interés del gobierno de Daniel Noboa en replicar aspectos del modelo salvadoreño para enfrentar el narcoterrorismo.
El viaje se enmarca en un contexto de creciente violencia en Ecuador, donde Noboa declaró un “conflicto armado interno” en 2024 para combatir bandas criminales, inspirándose en el régimen de excepción de Bukele, vigente desde marzo de 2022. Este régimen ha permitido la detención de más de 75.000 personas en El Salvador, aunque ha sido criticado por organizaciones como Human Rights Watch por presuntas violaciones de derechos humanos, incluyendo detenciones arbitrarias y hacinamiento. En Ecuador, con 31.321 reclusos en 2022, Noboa planea construir cárceles de máxima seguridad y ha propuesto deportar a 1.500 presos extranjeros para reducir la población carcelaria.
La visita ha generado reacciones mixtas. En redes sociales, algunos usuarios elogiaron el interés en el modelo de Bukele, mientras otros, como el usuario @juanmoreano35, criticaron la admiración por un sistema cuestionado internacionalmente. La experiencia salvadoreña, que combina represión con programas de reconstrucción social, será evaluada por el gobierno ecuatoriano para fortalecer su sistema penitenciario y combatir el crimen organizado en un contexto de alta polarización política.