El Municipio de Guayaquil anunció el 16 de mayo de 2025 la elaboración de un informe técnico para esclarecer las denuncias de la Fundación Rescate Animal Ecuador, que acusó a la Dirección de Protección de los Derechos de los Animales de un “abuso de eutanasias” en perros y gatos atendidos en 2025. La fundación reportó un incremento del 250% en los sacrificios, con 56 animales eutanasiados en los primeros tres meses bajo la gestión de Ronald Contreras, casi igualando los 58 casos de todo 2024. En respuesta, la Alcaldía convocó esa misma noche a su equipo técnico para detallar los casos y reafirmó su compromiso con el bienestar animal, según un comunicado difundido en redes sociales.
La controversia llevó a Rescate Animal a terminar unilateralmente un convenio de intercambio de información con el Municipio, calificando la gestión de la Dirección como “deficiente y eutanásica”. Publicaciones en X, como las del usuario @Danielsalcan_, también denunciaron un aumento de eutanasias en Guayaquil, Quito y Machala, generando indignación ciudadana. La normativa municipal, vigente desde 2009, permite la eutanasia en casos de animales agresivos o con enfermedades terminales, siempre bajo estrictos protocolos que prohíben causar dolor. Sin embargo, activistas critican la falta de transparencia y cuestionan si las decisiones cumplen con las cinco libertades básicas del bienestar animal, como vivir sin sufrimiento.
El Municipio destacó que su Centro de Bienestar Animal, inaugurado en 2022 con una inversión de $1.8 millones, ofrece servicios como atención veterinaria, esterilización y adopción, con ferias que han logrado hogares para decenas de animales, como las 31 adopciones en 2020 en el parque de la Kennedy. No obstante, las denuncias han avivado el debate sobre la tenencia responsable y el manejo de la fauna urbana, con la Dirección enfrentando críticas por presuntas condiciones insalubres y falta de claridad en los procedimientos. La concejala Tatiana Coronel, defensora de iniciativas de adopción, no se ha pronunciado directamente sobre el caso, pero su rol como vicealcaldesa refuerza la atención municipal al tema. El informe técnico, aún en elaboración, será clave para responder a las acusaciones y definir el rumbo de las políticas de bienestar animal en Guayaquil.