El Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) sufrió una rotura en el kilómetro 86, sector El Reventador, Sucumbíos, debido a un movimiento en masa, informó Petroecuador el 16 de junio de 2025. La empresa estatal suspendió el bombeo de crudo y movilizó personal técnico para contener el derrame, implementando un plan de contingencia para mitigar el impacto ambiental en la zona amazónica. Las operaciones de los campos petroleros se mantienen, pero el transporte de crudo está paralizado hasta completar las reparaciones.
La rotura, causada por un deslizamiento de tierra, recuerda incidentes previos en el SOTE, como el de marzo en Esmeraldas, donde se derramaron 25.116 barriles de petróleo. Petroecuador no ha precisado el volumen del crudo vertido en este caso, pero trabaja en la limpieza y remediación de ríos y vegetación afectados. La empresa enfrenta críticas por falta de mantenimiento, con señalamientos de “autosabotaje” por parte de trabajadores, quienes alertaron sobre riesgos en la infraestructura desde febrero.
Las autoridades han priorizado la atención a comunidades cercanas, garantizando agua potable y alimentos, mientras el Cuerpo de Ingenieros del Ejército apoya las labores de reparación. Petroecuador estima que las operaciones podrían reanudarse en las próximas horas, pero la recurrencia de estos incidentes subraya la vulnerabilidad del SOTE ante eventos geológicos y la necesidad de una solución definitiva, como la propuesta de 2022 para una nueva ruta en El Reventador, con un costo estimado de 100 millones de dólares.