En la víspera de Halloween en el distrito de Santiago de Surco, Lima, la Policía Nacional del Perú desplegó un operativo poco convencional en el que un agente vestido como Spider-Man actuó junto a otros uniformados para desarticular a la banda conocida como “Los Diabólicos de Malambito”.
Durante el procedimiento se incautaron 2.100 envoltorios de pasta básica de cocaína (PBC) y se detuvo a tres personas que han sido puestas a disposición del Depincri Surco para las diligencias de rigor.
La estrategia del disfraz tiene antecedentes: la institución ha utilizado personajes populares en operativos tácticos con el objetivo de sorprender a los traficantes, reducir su capacidad de reacción y aumentar la visibilidad del accionar policial.
Este tipo de intervenciones plantea un doble debate: por un lado, la innovación en métodos de lucha contra el microtráfico; por otro, la necesidad de evaluar el impacto en la percepción pública del uso de disfraces en procedimientos oficiales.
