La fiscal general de EE. UU., Pam Bondi, ordenó el 4 de agosto de 2025 al Departamento de Justicia iniciar una investigación con un gran jurado sobre una supuesta conspiración para deslegitimar la victoria de Donald Trump en 2016, conocida como la ‘trama rusa’. La medida responde a una denuncia de la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, que acusa a funcionarios de la Administración Obama de fabricar pruebas sobre interferencia rusa en las elecciones.
Gabbard, quien desclasificó documentos en julio, alega que altos cargos, incluidos James Clapper y John Brennan, manipularon inteligencia para vincular a Trump con Rusia. Bondi creó un equipo para evaluar estas pruebas y ordenó a un fiscal federal presentarlas ante un gran jurado, lo que podría derivar en imputaciones, según Fox News Digital.
La denuncia señala una reunión del 9 de diciembre de 2016 en la Casa Blanca, donde líderes del Consejo de Seguridad Nacional, como Clapper, Brennan, Susan Rice y John Kerry, habrían ordenado una revisión basada en información no creíble sobre interferencia rusa, a solicitud del entonces presidente Obama.
La investigación original de 2016, liderada por el exdirector del FBI James Comey, no encontró pruebas de una conspiración criminal entre Trump y Rusia, pero sí documentó intentos rusos de influir en las elecciones a favor de Trump. La nueva pesquisa reaviva un capítulo polémico de la política estadounidense.