La industria del entretenimiento en Hollywood se encuentra en ebullición tras la controvertida presentación de Tilly Norwood, una actriz completamente creada por inteligencia artificial (IA), durante el Festival de Cine de Zúrich. La iniciativa, impulsada por la productora holandesa Eline Van der Velden, ha provocado una oleada de indignación entre artistas y profesionales del sector, quienes ven en este proyecto una amenaza directa a los empleos y la creatividad humana.

Tilly Norwood, diseñada para emular el carisma y el atractivo de figuras como Scarlett Johansson, cuenta ya con un perfil en Instagram y ha sido promocionada como una posible estrella de Hollywood. Su creadora, Eline Van der Velden —comediante, productora y fundadora de la compañía de IA Particle6, así como del estudio de talentos digitales Xicoia—, reveló en el evento del sábado que, en los próximos meses, se anunciará qué agencia de representación contratará a la actriz virtual para integrarla en producciones cinematográficas. Esta declaración fue el detonante de la “bronca” generalizada, según reportes de medios especializados.

La comunidad artística ha expresado su preocupación por las implicaciones éticas y laborales de esta innovación. Varios actores y figuras prominentes han repudiado públicamente la idea, argumentando que la IA podría desplazar a talentos reales y diluir la autenticidad del cine. “Esto no es progreso, es una erosión de lo que hace al arte humano”, se ha escuchado en redes sociales y declaraciones preliminares, reflejando el temor a un futuro donde las máquinas compitan directamente con personas en la pantalla grande.

Van der Velden, por su parte, defiende su creación como un avance tecnológico que expande las posibilidades narrativas, pero la reacción adversa ha sido inmediata y masiva. El festival suizo, que buscaba destacar innovaciones, se ha convertido en el epicentro de un debate global sobre el rol de la IA en el entretenimiento. Mientras tanto, el perfil de Norwood en Instagram acumula seguidores curiosos, pero también comentarios críticos que cuestionan si esta “nueva estrella” realmente tiene un lugar en la meca del cine.

La polémica llega en un momento sensible para Hollywood, aún recuperándose de huelgas recientes por derechos laborales en la era digital. Expertos predicen que este caso podría catalizar discusiones más amplias sobre regulaciones para el uso de IA en la producción audiovisual, exigiendo protecciones para los trabajadores del sector. Por ahora, el mundo observa con atención: ¿será Tilly Norwood el futuro del cine, o solo un experimento que acelera el choque entre tecnología y tradición?
