La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, optó nuevamente por no ofrecer comentarios sobre la condecoración de la opositora venezolana, María Corina Machado, con el Premio Nobel de la Paz y su llegada a Oslo.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum reafirmó la tradicional posición diplomática mexicana:
“La última vez dije: ‘Sin comentarios y sigo diciendo sin comentarios’. Es muy importante decir que México siempre va a defender la autodeterminación de los pueblos, la no invasión, la no injerencia”.
La mandataria señaló que, ante “la situación que está viviendo Venezuela”, la opinión del Gobierno mexicano siempre será la misma: la de la “no intervención” y la de “utilizar el diálogo para poder resolver cualquier conflicto”.
La Odisea de Machado
Las declaraciones de Sheinbaum se dan en el contexto del complejo viaje de Machado para recibir el galardón, una “odisea” que comenzó con su salida clandestina de Venezuela, según analistas, posiblemente por vía marítima hacia Curazao, y que culminó con un largo viaje a Oslo.
A su llegada a la capital noruega, Machado salió al balcón del Grand Hotel para saludar a sus seguidores, cantando el himno de su país. La líder opositora, de 58 años, había denunciado previamente al gobierno de Nicolás Maduro y asegurado: “El gobierno venezolano dice que soy terrorista y que tengo que pasar el resto de mi vida en la cárcel, y me buscan”.
Machado dedicó su Nobel de la Paz a todo el pueblo de Venezuela y a los “héroes” que luchan por la “libertad”, en un discurso que fue leído por su hija, Ana Corina Sosa, quien recogió el galardón en su nombre.








