Un presunto integrante del grupo armado Comandos de la Frontera fue abatido el 15 de mayo de 2025 durante un enfrentamiento con el Ejército ecuatoriano en San Marcos, Orellana. El individuo, localizado en una vivienda donde se ocultaba, abrió fuego contra una patrulla militar que realizaba operaciones contra la minería ilegal en Alto Punino, a 65 km de la frontera con Colombia. Los soldados, en uso legítimo de la fuerza, respondieron al ataque, resultando en la muerte del agresor, según informó el Ejército. En el lugar se incautó un fusil utilizado en el enfrentamiento.
La operación, que involucra a 1.800 militares de las fuerzas Terrestre, Naval y Aérea, también permitió destruir campamentos ilegales y decomisar armas, municiones y explosivos. Este incidente sigue a la emboscada del 9 de mayo en la misma zona, donde 11 militares fueron asesinados por Comandos de la Frontera, grupo ligado a Los Lobos y al narcotráfico. En los últimos días, cuatro presuntos guerrilleros, incluido el líder alias “Compadre”, han sido abatidos. El 13 de mayo, se hallaron dos cuerpos más del grupo, junto con granadas, mochilas y cargas explosivas en maquinaria minera.
El Ejército, empleando tecnología como cámaras FLIR y sensores LiDAR, enfrenta condiciones adversas en la selva amazónica, complicadas por el clima y el terreno. Las operaciones buscan neutralizar a este grupo disidente de las FARC, que controla actividades ilícitas como minería y extorsión en la región. La escalada de violencia subraya los desafíos del conflicto armado interno declarado en 2024, con el compromiso militar de proteger la soberanía y seguridad nacional.