La reactivación del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP) y del Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) permitió a Petroecuador elevar su producción de 18.992 barriles diarios el 22 de julio a 157.252 el 27 de julio, un aumento del 728 %. Las compañías privadas alcanzaron 34.876 barriles, sumando una producción nacional de 192.128 barriles diarios, según la ARCH.
El bombeo se paralizó el 1 de julio por erosiones en los ríos Coca y Loco en Napo, causadas por lluvias, que obligaron a construir variantes en las tuberías. El OCP retomó operaciones el 23 de julio y el SOTE el 25, tras retrasos por condiciones climáticas.
Antes de la emergencia, la producción nacional era de 464.637 barriles diarios (Petroecuador: 369.591; privadas: 91.596). La paralización redujo la producción en más del 90 %, cerrando miles de pozos.
Aunque los niveles mejoraron, aún están lejos de los registrados pre-crisis, mientras se estabilizan las operaciones en los oleoductos.