Guayaquil, Ecuador. Un nuevo capítulo en la tensa relación entre las autoridades de Guayaquil se escribió este martes, cuando la gobernadora del Guayas, Zaida Rovira, rechazó de manera contundente la invitación a reunirse con el alcalde Aquiles Álvarez para abordar temas de seguridad en la ciudad. La respuesta de Rovira fue directa y dejó clara la distancia política entre ambos funcionarios.
“No me reuniré contigo porque no tengo tiempo para tardes de té”, sentenció la gobernadora, una frase que subraya su negativa a sentarse a dialogar con el burgomaestre. Rovira argumentó que se encuentra ocupada “trabajando en las calles, haciendo lo que el Alcalde debió hacer hace mucho tiempo”, y mencionó su labor conjunta con funcionarios de Segura EP en reuniones de seguridad. La gobernadora no dudó en expresar su percepción de que el alcalde Aquiles Álvarez intenta “pasar sus responsabilidades” a la Gobernación, evidenciando una profunda división sobre quién debe liderar la lucha contra la inseguridad en la urbe porteña.