La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) define a la Guardia Indígena como una “estrategia de resistencia milenaria, colectiva y civil para defender la vida frente a las amenazas a sus territorios”.
Integrada en su mayoría por jóvenes, la guardia porta el bastón, la lanza y el atzial como símbolos de su función, y han incorporado escudos de metal para protegerse de las bombas lacrimógenas y los toletes en los enfrentamientos con la fuerza pública. Se les ha visto ya en las protestas de Imbabura y Cotopaxi durante la primera semana del actual paro.
Origen y Funciones
El mecanismo de la Guardia Indígena ganó protagonismo en los paros nacionales previos:
- Octubre de 2019: Se implementó para evitar la “infiltración” de la fuerza pública, vigilar a los medios de comunicación y estar en primera línea de confrontación con la Policía Nacional.
- Junio de 2022: Su rol de protección a los líderes se hizo más visible durante la paralización contra el expresidente Guillermo Lasso.
La CONAIE ha expedido un mandato que reconoce la existencia de la Guardia Indígena como un derecho constitucional a la libre determinación y resistencia. Rechazan ser relacionados con el “terrorismo o narcotráfico”, argumentando que ese argumento busca “estigmatizarlos”.
Según la CONAIE, sus tareas incluyen:
- Defensa de derechos colectivos: territoriales, comunitarios y de la naturaleza.
- Vigilancia: Asegurar el cumplimiento de las obligaciones del Gobierno nacional junto a las organizaciones indígenas.
- Protección: Defender a sus pares de acciones del Estado, la delincuencia, y las actividades de extracción petrolera y minera en sus límites territoriales.
En esencia, se definen como los “cuidadores y defensores de los derechos de nacionalidades y pueblos indígenas”.