La Coalición por la Movilidad Segura presentó el 29 de abril de 2025 un proyecto de reformas al Código Orgánico Integral Penal (COIP) para reducir los siniestros viales en Ecuador, que en 2024 registraron un aumento según la Agencia Nacional de Tránsito (ANT). La propuesta, respaldada por la asambleísta Esther Guzmán, endurece sanciones por exceso de velocidad, conducción en estado de ebriedad y otras infracciones, con el objetivo de corregir conductas de riesgo.
Entre las medidas destaca la reducción del límite de alcohol en sangre a 0,3 gramos por litro para conductores particulares y 0,5 gramos por litro para la pena máxima, frente a los 0,8 gramos actuales. También se propone eliminar rangos moderados de exceso de velocidad, que permiten hasta 35 km/h adicionales, ya que incentivan comportamientos peligrosos. Gladys Meléndez, de la organización Tandem, señaló que el exceso de velocidad es el factor más mortal en los siniestros, responsables de 1.944 muertes en 11 meses de 2019.
La iniciativa incluye sanciones combinadas, como multas y penas de cárcel, para infracciones graves. En 2023, el 44% de los fallecidos en siniestros viajaban en motocicletas, y la imprudencia del conductor fue la principal causa (49,6%), seguida por el exceso de velocidad (15,9%). La Coalición, formada por colectivos como Carishina en Bici y la Asociación de Peatones de Quito, busca que estas reformas, presentadas a la Asamblea Nacional, promuevan una cultura de seguridad vial y reduzcan las cifras de lesionados, que alcanzaron 22.868 entre enero y octubre de 2024.
El proyecto también responde a la necesidad de actualizar la Ley de Tránsito, reformada en 2021 para eliminar recargos en multas y cursos obligatorios para licencias no profesionales. La educación vial sigue siendo clave, pero las organizaciones insisten en que sanciones más estrictas son esenciales para disuadir conductas de riesgo. La propuesta está en manos del Legislativo, donde se espera un debate que priorice la seguridad de peatones, ciclistas y conductores.