Más de 1600 vuelos en Estados Unidos enfrentaron retrasos el viernes debido a problemas técnicos y operativos, con los aeropuertos de Dallas-Fort Worth y Miami como los más afectados. Las interrupciones, reportadas por la Administración Federal de Aviación (FAA), generaron congestión en las terminales y molestias para miles de pasajeros. Las aerolíneas instan a verificar el estado de los vuelos antes de dirigirse a los aeropuertos.
El aeropuerto de Dallas-Fort Worth, un importante centro de operaciones para American Airlines, registró demoras significativas debido a fallos en sistemas de gestión de tráfico aéreo, agravados por alta demanda. En Miami, las tormentas locales contribuyeron a las interrupciones, afectando tanto llegadas como salidas. Estas situaciones reflejan los desafíos persistentes en la infraestructura aérea estadounidense, especialmente en periodos de alta actividad.
Los pasajeros enfrentan largas esperas y posibles cancelaciones, mientras las aerolíneas trabajan para reubicar viajeros. La FAA recomienda consultar con las aerolíneas y usar plataformas como FlightAware para monitorear actualizaciones en tiempo real. Estos incidentes subrayan la necesidad de mejoras en los sistemas de control aéreo y la coordinación entre aeropuertos y aerolíneas para minimizar el impacto en los viajeros.