La tensión internacional por la crisis en Venezuela sumó un nuevo actor de peso este jueves. El gobierno de Rusia instó a la administración de Donald Trump a mostrar moderación y evitar acciones que puedan derivar en consecuencias impredecibles para la región, tras la orden de ejecutar un bloqueo total a los petroleros sancionados.
⚠️ La advertencia del Kremlin
A través de su Ministerio de Relaciones Exteriores, Rusia expresó su profunda preocupación por la escalada militar en el Caribe:
- Riesgo regional: Moscú espera que la Casa Blanca se abstenga de avanzar hacia una situación que amenace la estabilidad de todo el hemisferio occidental.
- Llamado a la desescalada: El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, urgió a los países de la región a evitar un desarrollo “impredecible” de los acontecimientos.
- Respaldo a Maduro: Rusia reafirmó su posición como “aliado y socio” estratégico de Caracas, manteniendo una comunicación fluida y constante con el palacio de Miraflores.
El factor militar y económico
El anuncio de Trump sobre que Venezuela está “completamente rodeada” por buques de guerra ha encendido las alarmas sobre una posible intervención directa. Ante esto, la postura rusa se vuelve clave debido a su histórico rol de apoyo al régimen chavista:
- Apuntalamiento económico: En crisis anteriores, Rusia ha sido fundamental para sostener las finanzas venezolanas y facilitar la comercialización de crudo fuera de los circuitos tradicionales.
- Suministro energético: Mientras Venezuela asegura que sus exportaciones fluyen con normalidad, el bloqueo estadounidense busca cortar precisamente esos lazos comerciales que Moscú ayuda a proteger.
- Relación Putin-Maduro: Hace apenas unas semanas, Vladimir Putin reafirmó personalmente su apoyo a Maduro, consolidando un frente diplomático opuesto a las sanciones de Washington.
Incertidumbre en el Caribe
A pesar de la retórica de la Casa Blanca, aún no está claro cómo se ejecutará operativamente el bloqueo frente a buques que puedan tener bandera o intereses de potencias aliadas a Venezuela, como Rusia o China. La presencia de la Armada estadounidense en aguas internacionales sigue siendo el punto de mayor fricción y riesgo de un incidente armado.








