El embajador ruso en Francia, Alexey Meshkov, respondió a las declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump, quien respaldó la posibilidad de derribar aeronaves rusas que violen el espacio aéreo de la OTAN. “Bueno, sería la guerra”, afirmó Meshkov, elevando el tono de la confrontación diplomática. La tensión se produce en un momento de crecientes incidentes aéreos en Europa.
La Alianza Atlántica (OTAN) y varios países europeos como Polonia, Rumanía, Estonia y Dinamarca han denunciado recientes incursiones de cazas y drones rusos sobre su territorio, calificándolas de “acciones imprudentes”. Ante esta situación, la OTAN reiteró que no tolerará violaciones de soberanía. En Dinamarca y Noruega, la situación se agravó con la suspensión de operaciones en varios aeropuertos por la presencia de drones no identificados. La primera ministra danesa, Mette Fredriksen, describió el suceso como un “ataque grave”.
La postura de Trump, que apoya el derribo de aviones rusos “dependiendo de las circunstancias”, ha sido interpretada como un cambio de política que podría llevar a un enfrentamiento directo. El embajador ruso dejó claro que cualquier acción de este tipo sería vista como el inicio de un conflicto. Por otro lado, al ser consultado sobre un posible acuerdo de paz en Ucrania, Trump evitó dar una respuesta definitiva, prometiendo una “en un mes”.