Durante la noche del 24 de diciembre de 2025, el gobierno de Vladimir Putin ejecutó un ataque masivo contra territorio ucraniano utilizando un total de 131 drones de diversos tipos, incluyendo modelos Shahed y Gerbera. Según el reporte oficial de la Fuerza Aérea de Kiev, los sistemas de defensa lograron neutralizar 106 de estos dispositivos en las regiones del norte, sur y este del país. No obstante, 22 drones lograron impactar en infraestructuras civiles y portuarias, principalmente en la región de Odesa, donde se reportó la muerte de una persona tras el derrumbe de un edificio administrativo y daños considerables en instalaciones de almacenamiento y producción industrial.

En una respuesta inmediata, las fuerzas de Ucrania lanzaron una contraofensiva dirigida a debilitar la logística energética del Kremlin. Drones ucranianos impactaron en el puerto de la ciudad rusa de Temriuk, en la región de Krasnodar, provocando un incendio de grandes proporciones en dos tanques de almacenamiento de petróleo que alcanzó los 4.000 metros cuadrados. El Ministerio de Defensa de Rusia afirmó haber interceptado 141 drones ucranianos en diversas regiones fronterizas y cerca de Moscú. Este intercambio de ataques durante la festividad navideña subraya la intensificación del conflicto, con ambos bandos enfocados en golpear puntos críticos de suministro de combustible y generación de energía de cara al invierno.









