WASHINGTON — El senador de Maryland, Chris Van Hollen, volaba el viernes de regreso a Estados Unidos desde El Salvador tras reunirse con Kilmar Ábrego García, deportado erróneamente a ese país por el gobierno del presidente Donald Trump. No se sabe qué sucederá a continuación en el caso.
Otros demócratas han dicho que volarán a El Salvador para presionar por su liberación, pero la presión partidista no ha dado resultados. Trump y el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, se han empeñado en mantener a Ábrego García fuera de Estados Unidos, aun cuando varios funcionarios del gobierno republicano de Trump han calificado su deportación como un error y la Corte Suprema de Estados Unidos ha instado a la administración a facilitar su regreso.
El jueves, Bukele publicó imágenes de la reunión de Van Hollen con Ábrego García y dijo que el prisionero del notorio Centro de Confinamiento del Terrorismo, o CECOT, “tiene el honor de permanecer bajo la custodia de El Salvador”. La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, señaló que él “nunca volverá a vivir en Estados Unidos”.
La lucha por Ábrego García es el más reciente punto de conflicto partidista, ya que los demócratas han luchado por abrirse paso y contraatacar durante los primeros meses de la segunda presidencia de Trump.