El exfutbolista Gerard Piqué y la cantante Shakira vendieron una de sus mansiones tras su separación, según confirmaron ABC y La Vanguardia, tras un proceso de negociación prolongado marcado por desacuerdos en cuanto al precio.

La propiedad que se vendió forma parte de un exclusivo complejo inmobiliario que la expareja adquirió cuando estaban juntos. Se trata de una propiedad diseñada por la arquitecta Mireia Admetller, la cual incluye tres casas interconectadas, jardines enormes, piscinas, gimnasio, sala de juegos, estudio de grabación y terrazas con vistas preciosas.

El proceso de venta no fue sencillo, ya que la negociación estuvo marcada por Shakira en mantener un precio elevado, mientras que Piqué presionaba por cerrar la operación cuanto antes y así poder instalarse con su pareja Clara Chía en una nueva residencia.

Shakira solicitaba hasta 12 millones de euros y el exjugador estaba dispuesto a aceptar la oferta de 6 y 10 millones. Finalmente, fuentes inmobiliarias consultadas por ABC, señalaron que el precio fijado resultaba alto incluso para una zona tan exclusiva como Esplugues de Llobregat.

La parcela total de la casa alcanza los 3.800 m2, con más de 700 m2 construidos en cada una de las viviendas principales. El diseño contempla tres plantas principales y dos niveles subterráneos, que incluyen bodega y garaje.

Actualmente, las otras dos viviendas principales del complejo permanecen en el mercado por un precio conjunto de 11 millones de euros, y está a cargo de una sociedad administrada por Joan Piqué, padre del exfutbolista, según informó ABC, para evitar la exposición mediática.