La Unión Europea intensifica esfuerzos para negociar con EE.UU. y evitar aranceles del 30% a sus productos, anunciados por el presidente Donald Trump para el 1 de agosto. La Comisión Europea, liderada por Maros Sefcovic, planea contramedidas por $84,000 millones si las conversaciones fallan.
Sefcovic, tras reunirse con ministros de Comercio en Bruselas, expresó su compromiso de dialogar con EE.UU., pero enfatizó la necesidad de respuestas “proporcionadas y calibradas” ante aranceles “injustificados”. La UE suspendió hasta agosto sus represalias por tarifas previas de EE.UU. sobre acero y aluminio.
Ministros como Laurent Saint-Martin (Francia) y Carlos Cuerpo (España) respaldan negociaciones, pero urgen preparar contramedidas “sin tabúes”. Lars Lokke Rasmussen (Dinamarca) abogó por evitar una escalada, aunque advirtió que la UE debe estar lista para responder.
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión, reiteró la preferencia por una solución negociada, manteniendo abierta la vía del diálogo para evitar una guerra comercial, mientras la UE evalúa estrategias ante la incertidumbre.