El ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, denunció que Estados Unidos ha “triplicado” la cantidad de vuelos de aviones espía cerca de su espacio marítimo. Según Padrino López, en agosto de 2025 se ha detectado una mayor presencia de aeronaves de inteligencia estadounidense, como el avión de reconocimiento RC-135U Combat Sent, el avión de alerta temprana E-3 Sentry AWACS, el avión de patrullaje marítimo Boeing P-8 Poseidón, y el avión cisterna Boeing KC-135 Stratotanker. El ministro aseguró que estas naves tienen la capacidad de realizar vigilancia aérea y de superficie, así como de recoger información a través de radares, sensores y sistemas de inteligencia electrónica.
Padrino López afirmó que las operaciones de inteligencia se han realizado con “mucha frecuencia” en el Caribe, cerca de las costas venezolanas. El ministro señaló que los aviones, como el RC-135U, tienen un alcance que llega hasta el interior del territorio venezolano y que, aunque el gobierno de EE.UU. no ha explicado el propósito de estas misiones, su naturaleza es claramente de espionaje. La denuncia se produce en un contexto de tensiones entre ambos países, donde la administración de Donald Trump ha acusado a Nicolás Maduro de narcotráfico y de liderar el “Cartel de los Soles”, ofreciendo una recompensa de 50 millones de dólares por información que conduzca a su captura.
El gobierno de Venezuela ha negado rotundamente las acusaciones de narcotráfico. Padrino López aseguró que las fuerzas armadas venezolanas están al tanto de los sobrevuelos y que están llevando a cabo sus propios procesos de inteligencia para monitorear la situación. La presencia de estas aeronaves de alta tecnología cerca de las fronteras marítimas de Venezuela intensifica la presión sobre el gobierno de Maduro, cuya legitimidad no es reconocida por Washington. La situación subraya la compleja dinámica de relaciones entre ambos países en un momento de gran inestabilidad.
