En el marco del decimoquinto día del paro nacional convocado por la CONAIE, el ministro de Desarrollo Humano, Harold Burbano, defendió la postura del Ejecutivo y acusó a una facción del movimiento indígena de ser la que se ha “cerrado al diálogo”. En entrevista con EL UNIVERSO, Burbano sostuvo que el Gobierno ha mantenido conversaciones constantes con todos los sectores, incluso con el movimiento indígena, desde antes de la eliminación del subsidio al diésel, que motivó las protestas.
El ministro arremetió contra los manifestantes, asegurando que son “pequeñas facciones del movimiento indígena que ahorita lo que quieren es incendiar el país, de manera focalizada”. Burbano hizo un llamado a los dirigentes a deponer las medidas de violencia, advirtiendo que, de no hacerlo, “al Gobierno le tocará tomar otras medidas”.
Respecto a la duración del paro, la autoridad sugirió que esta dependerá de la “capacidad de tener recursos para sostener las protestas” por parte de los manifestantes, y lanzó una seria acusación: “Creemos que estos recursos están viniendo de facciones políticas, como de grupos de delincuencia organizada, así que estamos monitoreando para medir e intervenir en ese sentido”.
CONAIE y el Gobierno Intercambian Advertencias sobre “Toma de Quito”
La tensión se intensificó con las declaraciones cruzadas sobre la capital. El fin de semana anterior, el presidente de la CONAIE, Marlon Vargas, amenazó con la “toma de Quito” si el Gobierno no atendía sus diez demandas, incluida la derogatoria del Decreto 126. Sin embargo, este lunes 6 de octubre, Vargas matizó su postura: “Nuestra lucha no es contra las ciudades, sino contra años de abandono, pobreza y desigualdad. No queremos más desaparecidos ni asesinados por exigir dignidad”.
El presidente Daniel Noboa respondió enérgicamente a las insinuaciones: “Nadie puede venir a tomarse por la fuerza la capital de todos los ecuatorianos. A los que eligen la violencia, los espera la ley. A los que actúan como delincuentes, se los tratará como delincuentes”. El paro, que se inició el 22 de septiembre, se ha concentrado principalmente en Imbabura y otros territorios de la Sierra.