Walmart, la mayor cadena minorista de Estados Unidos, implementará en 2025 una serie de cambios que transformarán su operación y experiencia de compra. La empresa presentó un rediseño de su identidad visual, con un logotipo modernizado que mantiene la chispa amarilla en un tono más opaco y formas redondeadas, inspirado en la gorra de camionero de su fundador, Sam Walton. Este cambio, ya visible en su página web, aplicación y nueva sede en Bentonville, Arkansas, se extenderá a todas sus tiendas en EE. UU., México y América Latina para finales de año, buscando una imagen minimalista y adaptable a formatos digitales.
Además, Walmart cerrará 11 tiendas en 2025, incluyendo cinco en estados como California, Georgia, Maryland, Wisconsin y Ohio, debido a resultados financieros insuficientes y al impacto de la inflación, que redujo el poder adquisitivo de los clientes. Sin embargo, la compañía planea abrir nueve nuevas sucursales, como en Tuscaloosa, Alabama, y Milton, Florida, y renovar o construir 45 gasolineras y centros de conveniencia para ofrecer mayor valor a los consumidores. La cadena también impulsa su comercio electrónico, con entregas en tres horas al 95% de los estadounidenses para finales de 2025, tras alcanzar USD 121 mil millones en ventas online en 2024.
La empresa ha introducido medidas de seguridad, como sellos rojos en cajas de autoservicio para prevenir fraudes y candados en cortes de carne en algunas tiendas, además de eliminar el autopago en ciertos locales para combatir robos. Walmart también lanzó una alianza con Rebag para vender productos de lujo de segunda mano, como bolsos de Hermès y Rolex, manteniendo precios accesibles. Estas iniciativas reflejan la apuesta de Walmart por adaptarse a un mercado competitivo, marcado por la inflación y cambios en el comportamiento del consumidor, mientras enfrenta críticas por el cierre de tiendas que afectan a comunidades locales.
