El colectivo Ecuador Libre de Transgénicos en Defensa de la Pachamama alertó sobre la aprobación de semillas de arroz editadas genéticamente por el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) en mayo de 2025, mediante el Acuerdo Ministerial n.º 063 de 2023. Según la organización, estas semillas, tolerantes a herbicidas, violan el artículo 15 de la Constitución, que prohíbe cultivos transgénicos por sus riesgos para la salud y el ambiente, incluyendo pérdida de biodiversidad y contaminación.
La edición génica, técnica usada en estas semillas, modifica el ADN sin introducir material genético foráneo, a diferencia de los transgénicos. Sin embargo, el colectivo sostiene que los resultados son similares y que su uso masivo podría causar enfermedades crónicas y dañar el patrimonio genético del arroz criollo. Cada ecuatoriano consume unos 50 kg de arroz al año, lo que amplifica la preocupación por estos cultivos.
Raúl Jaramillo, director del Iniap, defendió la técnica, argumentando que permite un mejoramiento vegetal rápido para enfrentar el cambio climático y necesidades agrícolas. Aclaró que las semillas no son transgénicas, ya que solo se editan genes específicos, y aún no están registradas para comercialización, debiendo cumplir con la Ley de Semillas. Jaramillo enfatizó que estas técnicas son esenciales para competir con estándares internacionales.
El Iniap destacó que solo el 19 % de las 404.932 hectáreas de arroz en Ecuador usa semilla certificada, de las cuales la mitad es producida por ellos. Sus variedades, como Iniap-Impacto, ofrecen alto rendimiento y resistencia a plagas. Sin embargo, el colectivo insiste en que la edición génica es experimental y contraviene el artículo 401 de la Constitución, que prohíbe biotecnologías riesgosas.