Las protestas por la eliminación del subsidio al diésel en Ecuador se intensificaron este martes en la provincia de Imbabura, donde comuneros protagonizaron enfrentamientos con la fuerza pública. Según reportes oficiales, los manifestantes han utilizado métodos violentos, como el uso de perros para lanzar voladores en contra de los uniformados, además de caminar con palos con los que han roto ventanas de vehículos particulares y oficiales.
Las movilizaciones en rechazo al incremento del precio del combustible se han concentrado principalmente en las provincias de la Sierra centro y norte, como Cotopaxi, Tungurahua, Chimborazo e Imbabura, aunque también se han reportado cierres de vías en sectores de la Amazonía. En Quito, se han registrado marchas y concentraciones que han afectado la movilidad en puntos estratégicos.
El Gobierno Nacional ha reiterado que la eliminación del subsidio al diésel responde a la necesidad de ordenar las finanzas públicas, argumentando que dichos recursos serán redirigidos a programas sociales y de inversión en salud y educación. Además, el Ejecutivo asegura que el beneficio histórico del subsidio no favorecía de manera directa a los sectores más vulnerables, sino que, en muchos casos, terminaba beneficiando a contrabandistas y grandes transportistas.
A pesar de los argumentos oficiales, las organizaciones sociales y comuneros sostienen que la medida afecta de manera directa a la economía popular, especialmente en el transporte de productos agrícolas y en el costo de vida en las comunidades rurales.
La situación en el país continúa siendo tensa, con carreteras bloqueadas y llamados de los movimientos indígenas y campesinos a mantener la presión hasta que el Gobierno revierta la decisión.
