Zak Brown, director ejecutivo y CEO de McLaren, intensificó una de las disputas más fuertes de la Fórmula 1 al lanzar duras críticas contra el campeón Max Verstappen y su exrival, Christian Horner, exjefe de Red Bull. Brown, figura clave en la reconstrucción de McLaren que logró títulos de Constructores en 2024 y 2025, no solo arremetió contra la actitud del piloto neerlandés, sino que también acusó a Horner de haber cambiado radicalmente debido a la fama, el dinero y la gloria que le dio el éxito, especialmente con la serie documental Drive to Survive.
En una entrevista con The Telegraph, Brown calificó a Verstappen de ser un piloto “agresivo, demasiado brusco en pista”, cuya “arrogancia sale a relucir”. Respecto a Horner, a quien conoce desde hace más de tres décadas, Brown afirmó que “a veces, no juega limpio” y lo comparó con pilotos que sacan a sus rivales de la pista deliberadamente. La tensión entre ambos se remonta a cruces anteriores, como cuando Brown acusó a Red Bull de hacer trampa por no cumplir el límite presupuestario. El CEO de McLaren defendió la existencia del ego en F1, pero diferenció el “orgullo” que él utiliza del ego de Horner, que considera que lo llevó a cometer errores.
