Bajo un estricto resguardo de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, un grupo de privados de libertad fue transferido este miércoles al Centro de Rehabilitación Social de Latacunga. El operativo, realizado por vía terrestre, tuvo como objetivo principal desarticular las estructuras delictivas que operaban desde los centros penitenciarios del norte del país.
Desarticulación de bandas criminales
Entre los transferidos se encuentran 15 internos provenientes del centro carcelario de Esmeraldas, identificados como miembros de la organización delictiva Los Tiguerones, incluyendo a un ciudadano de nacionalidad colombiana.
Según los informes de inteligencia, el traslado responde a la necesidad de neutralizar a los grupos Los Tiguerones y Los Lobos, a quienes se les atribuye:
- Direccionamiento de delitos: Liderar redes de extorsión e intimidación contra comerciantes de Esmeraldas desde el interior de las celdas.
- Violencia interna: La ejecución de riñas, amotinamientos e intentos de fuga que han dejado múltiples víctimas.
- Control territorial: Recientemente, se investigó a seis integrantes de Los Lobos por dirigir extorsiones junto a una mujer en la provincia verde.
Un historial de violencia en Esmeraldas
El centro carcelario de Esmeraldas ha sido uno de los más conflictivos del sistema penitenciario, registrando episodios críticos en los últimos años:
- Masacres: Hechos violentos en diciembre de 2020, enero de 2022 y enero de 2024.
- Cifras recientes: En septiembre de este año se registraron 17 internos fallecidos.
- Fugas: Tres reos escaparon recientemente, de los cuales uno fue recapturado apenas el pasado 9 de diciembre.
- Conflictos entre bandas: Se reportó la muerte de dos presuntos integrantes del grupo armado Los Chehenos en sus propias celdas.
Custodia reforzada
Actualmente, el reclusorio de Esmeraldas permanece bajo la vigilancia compartida de la Fuerza Naval, la Policía y guías penitenciarios del SNAI. Con estos traslados a la Sierra Centro, las autoridades buscan reducir el hacinamiento y, sobre todo, romper las cadenas de mando de las bandas que utilizan las cárceles como centros de operaciones logísticas.
