La Corte Nacional de Justicia llamó a juicio al exvicepresidente Jorge Glas y a Carlos Bernal, exsecretario del Comité para la Reconstrucción de Manabí, por presunto peculado en el manejo de fondos destinados a la reconstrucción tras el terremoto de 2016. La decisión, tomada el 19 de mayo de 2025 por el conjuez Marco Aguirre, acogió el dictamen de la Fiscalía, que señala que ambos priorizaron proyectos ajenos a las necesidades urgentes de Manabí y Esmeraldas, desviando recursos recaudados mediante la Ley Orgánica de Solidaridad. Otros siete procesados, incluido el exministro Walter Solís, fueron sobreseídos, lo que generó la apelación inmediata de la fiscal general, Diana Salazar.
La investigación, iniciada tras un informe de la Contraloría General de 2019, apunta a irregularidades en contratos como el de la vía Manta-Colisa, valuado en más de $68 millones, y estima un desvío total de $367 millones. La Fiscalía sostiene que Glas, como presidente del Comité de Reconstrucción, y Bernal, como secretario, beneficiaron a terceros con obras que no respondían a la emergencia, evadiendo procesos de contratación pública. La audiencia preparatoria de juicio, reinstalada tras múltiples diferimientos, incluyó debates sobre la salud mental de Glas, cuya defensa solicitó internamiento en un hospital psiquiátrico por riesgo de suicidio, aunque el juez mantuvo la prisión preventiva para ambos acusados.
El caso, que también involucró al expresidente Rafael Correa en una investigación previa, ha avivado el debate político. La bancada correísta en la Asamblea Nacional bloqueó en 2023 la autorización para enjuiciar a Glas, argumentando que no era necesaria para exfuncionarios. Mientras tanto, Solís, refugiado en México, enfrenta procesos paralelos por otros casos de corrupción. La fiscal Salazar destacó que, a nueve años del terremoto, las víctimas aún sufren las consecuencias del mal manejo de fondos, subrayando la necesidad de justicia para las comunidades afectadas.
