El Festival Internacional de Danza Fragmentos de Junio, en su vigésima tercera edición, regresa a Guayaquil del 4 al 27 de junio de 2025, consolidando la ciudad como un referente de la danza contemporánea, según informó El Universo el 3 de junio de 2025. Bajo la dirección del coreógrafo Jorge Parra, el evento estrena una plataforma digital que amplía su alcance con transmisiones en vivo y contenido exclusivo, complementando actividades presenciales en espacios como la Universidad de las Artes, Teatro Zona Escena y el Malecón 2000. Esta iniciativa, apoyada por Iberescena, busca revitalizar el festival tras las restricciones de la pandemia (2021-2024), cuando se realizó a menor escala, y recuperar su esplendor de 2019.
La programación inicia el 4 de junio con la residencia internacional Laboratorio Retro, que se extenderá hasta el 13 de junio, enfocada en la formación de bailarines con docentes internacionales. El 15 de junio, un flashmob en el Malecón 2000 reunirá a cientos de bailarines, evocando el impacto de eventos pasados, como el de 2013 con 300 participantes. El 16 de junio, el concurso nacional Nuevos Coreógrafos a las 18:00 premiará a artistas emergentes con dinero en efectivo y un espacio en el festival. El 23 de junio, la muestra internacional HITL 2.0 Human in the Loop de Nicole Seiler, con auspicio de la Embajada de Suiza, se presentará en Zona Escena. Además, los días 23 y 24 de junio, el primer Encuentro de Programadores en Casa Zona Escena impulsará la Red Numal, un espacio colaborativo para artistas con entrada libre.
El festival, que comenzó en 1993 como una muestra espontánea en la Casa de la Cultura del Guayas, ha reunido a artistas de cinco continentes, incluyendo India, Cuba, Australia y África, consolidándose como una plataforma clave para la danza ecuatoriana. Parra destaca su impacto: “Es una vitrina para la danza nacional y un espacio de confrontación con propuestas globales”. Este año, la programación incluye talleres, proyecciones de videodanza y presentaciones que fusionan danza contemporánea con teatro y artes visuales, reflejando la diversidad técnica del género. A pesar de desafíos económicos y un entorno “hostil” para la danza contemporánea en Guayaquil, el apoyo de instituciones como el Ministerio de Cultura, el Teatro Centro de Arte y la Embajada Suiza ha permitido su expansión.
