Guayaquil, Ecuador. El alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, ha manifestado su profunda preocupación por la escalada de violencia e inseguridad que azota a la ciudad. Sus declaraciones se producen tras un reciente ataque en el sector de La Bahía, que dejó varios negocios con daños materiales y reavivó el temor entre los comerciantes y ciudadanos.
Álvarez hizo un enérgico llamado a la unidad de todas las autoridades competentes, incluyendo al Ministro del Interior y al Gobernador de Guayas. El objetivo es claro: combatir frontalmente la delincuencia que amenaza con paralizar la vida productiva y social de la urbe. El alcalde enfatizó que “si no nos unimos esto se convierte en una ciudad fantasma”, subrayando la urgencia de actuar mancomunadamente. Álvarez ofreció su disposición para reunirse con la Gobernadora de Guayas en busca de soluciones conjuntas y reconoció que la crisis actual es una responsabilidad compartida que exige la colaboración de todos los niveles de gobierno. Equipos técnicos ya trabajan en la reparación de los daños en La Bahía.
