El proyecto del Viaducto Sur, o Quinto Puente, en Guayaquil implica la expropiación de al menos 104 predios en el sur, desde la avenida Cacique Tomalá hasta la 25 de Julio, según el ministro de Transporte, Roberto Luque. Los pagos se basarán en el catastro municipal, afectando viviendas y empresas, incluidas algunas de la familia del presidente Daniel Noboa.
La obra, que conectará Guayaquil con Durán, Yaguachi y otros cantones, abarca 44 km y cinco puentes, con dos a cargo de la Prefectura del Guayas (225 m sobre el río Bulubulu y 50 m sobre el estero Mojahuevo). Luque destacó que las expropiaciones, 45 en un tramo y 59 en otro, se realizarán conforme a la ley, aunque generarán malestar entre los afectados.
El proyecto, postergado desde 2008, requiere ajustes por nuevos asentamientos. El trazado prioriza Cacique Tomalá para conectar con el corazón portuario, incluyendo obras adicionales como accesos al hospital del Guasmo, pasos elevados y aceras. La estructuración financiera para los tramos 1 al 3 está en licitación, mientras la Prefectura gestiona las expropiaciones de los tramos 4 y 5, con un presupuesto de $119,25 millones.
Luque aseguró coordinación con el Municipio de Guayaquil para infraestructura complementaria. El Viaducto Sur busca descongestionar el tránsito y mejorar la conectividad, pero enfrenta desafíos por el impacto social de las expropiaciones.