Este 11 de septiembre de 2025 se cumplen 24 años del atentado terrorista contra las Torres Gemelas en Nueva York, un hecho que marcó un antes y un después en la historia contemporánea.
A las 8:46 de la mañana del martes 11 de septiembre de 2001, el mundo quedó paralizado cuando un avión secuestrado impactó la Torre Norte del World Trade Center. Diecisiete minutos después, otro avión se estrelló contra la Torre Sur. El colapso de ambos rascacielos dejó imágenes de destrucción y desesperación que recorrieron el planeta en cuestión de minutos.
Ese día, cerca de 3.000 personas perdieron la vida, convirtiéndose en el ataque terrorista más mortífero en territorio estadounidense. A partir de entonces, el miedo al terrorismo se convirtió en una constante global y desató la llamada “guerra contra el terrorismo”, que incluyó las invasiones a Afganistán e Irak, conflictos que marcaron gran parte de la primera década del siglo XXI.
El impacto del 11-S no solo se reflejó en el ámbito militar y político, sino también en la vida cotidiana. Los aeropuertos del mundo cambiaron radicalmente sus protocolos de seguridad: controles más estrictos, restricciones en el equipaje, revisiones exhaustivas y la creación de nuevas agencias de seguridad, como la TSA en Estados Unidos.
Hoy, más de dos décadas después, el recuerdo del 11-S sigue siendo una herida abierta para millones de personas. Cada aniversario se convierte en una jornada de memoria y reflexión sobre cómo un solo día transformó la manera en que el mundo entiende la seguridad, la geopolítica y la amenaza del terrorismo internacional.
