Cinco provincias concentran el 83% de los asesinatos cometidos a escala nacional en Ecuador. Estos territorios forman parte del corredor criminal empleado por bandas y mafias para el tráfico de cocaína, armas y contrabando, además de operaciones de minería ilegal. Guayas encabeza la lista con el 44% de todos los homicidios, seguida por Los Ríos y Manabí, cada una con el 13.9%. A estas se suman El Oro (7.7%) y Esmeraldas (3.5%). En términos absolutos, ocho de cada diez asesinatos en el país ocurrieron en estas cinco jurisdicciones, donde se registraron 6,742 sicariatos.
Según el Gobierno, el 95% de estas muertes violentas está vinculado a amenazas criminales relacionadas con el tráfico de drogas, lo cual explica por qué la violencia se ha arraigado en la Costa ecuatoriana. Un análisis territorial del Ejecutivo explica que estas provincias son estratégicas para el crimen organizado por sus rutas terrestres y portuarias que facilitan el traslado de cocaína hacia Europa y Norteamérica. A pesar de los estados de excepción decretados por el presidente Daniel Noboa y la militarización, el país registra un promedio de un asesinato por hora en 2025.
