Los países de la Unión Europea (UE) aprobaron este lunes un endurecimiento de sus políticas migratorias, impulsadas por la Comisión Europea. Las medidas permitirán la creación de “centros de retorno” fuera de las fronteras del bloque, en un contexto de creciente influencia de la derecha y la extrema derecha.
Reunidos en Bruselas, los ministros del Interior de los 27 Estados miembros avanzaron en la aprobación de este paquete, que aún requiere la ratificación del Parlamento Europeo para entrar en vigor.
Puntos Clave del Endurecimiento Migratorio
Las nuevas medidas buscan endurecer el control y la expulsión de migrantes:
- “Centros de Retorno” Extracomunitarios: Se podrán abrir centros fuera de las fronteras de la UE para enviar a los migrantes cuya solicitud de asilo haya sido rechazada.
- Sanciones Severas: Se contemplan sanciones más severas contra las personas que se nieguen a abandonar el territorio europeo.
- Reenvío a “Países Seguros”: Se introduce la posibilidad de enviar a los migrantes a países que no son sus naciones de origen, pero que la UE considere “seguros”.
El comisario europeo Magnus Brunner subrayó la necesidad de “transmitir a los ciudadanos la sensación de que controlamos lo que está ocurriendo”, a pesar de que las entradas irregulares en Europa cayeron un 20% respecto al año anterior.
Mecanismo de Reparto de Solicitantes de Asilo
Los 27 Estados miembros también acordaron un nuevo sistema de reparto de solicitantes de asilo para aliviar a países como Grecia e Italia, situados en las principales rutas migratorias.
- Acogida o Contribución: Los demás Estados miembros deberán acoger solicitantes de asilo en su territorio. En caso de negarse, deberán aportar una contribución financiera de 20 000 euros (unos $23 000 dólares) por cada solicitante a los países que soportan mayor presión.
Críticas y Escepticismo
Las propuestas han generado la indignación de organizaciones de izquierda y ONG que defienden a los exiliados, quienes denuncian que las medidas vulneran los derechos humanos.
- ONG: Silvia Carta, de PICUM, advirtió que la UE está optando por políticas que “expondrán a más personas al peligro y a la inseguridad jurídica”.
- Países Escépticos: Persisten dudas en algunos países: España no cree que los “centros de retorno” sean efectivos debido a ensayos fallidos anteriores, mientras que Francia cuestiona la legalidad y eficacia de ciertas propuestas.
A pesar de las dudas, el ministro español del Interior, Fernando Grande-Marlaska, señaló que esta posición es cada vez más “difícil de mantener” debido a la fuerte presión de otros países y al respaldo de una alianza de diputados de derecha y extrema derecha en el Parlamento Europeo.
